¿Tu gato tiene tos? Te contamos qué puedes hacer
La tos en los felinos puede producirla el asma, una reacción alérgica que debemos tratar lo antes posible
¿Has notado que la tos en tu gato se produce con mayor frecuencia? ¿Parece que tiene otra bola de pelo y no puede expulsarla? ¿Tienes la sensación de que tu mascota se ahoga cada vez que tose?
La respuesta más común a estas preguntas es asma o bronquitis alérgica, una patología muy habitual en el mundo felino.
La tos despeja la garganta y las vías respiratorias al expulsar fuertemente el aire de los pulmones. Puede que parezcan tener algo en la garganta, pero su origen puede deberse a múltiples factores.
Si bien, aunque las toses de tipo alérgico son las más comunes, ya sea a pólenes, sustancias químicas o aromas en el ambiente, la tos de los felinos se puede confundir con náusea e incluso llegan a vomitar, cosa que supone otra enfermedad distinta al asma.
Además, existe una gran variedad de enfermedades infecciosas que provocan una tos prolongada en los gatos, divididas en tres grupos:
- Parasitaria: parásitos pulmonares que inflaman el tejido y causan una tos crónica (por ejemplo, la dirofilariosis)
- Vírica: virus que causan problemas en las vías respiratorias como la calicivirosis.
- Bacteriana: las bacterias que se adhieren al tracto respiratorio pueden derivar en infecciones que provocan la tos
¿Cómo sé si mi gato tiene asma?
Estos son los principales síntomas de un gato con asma:
- Dificultad respiratoria, sobre todo en la espiración
- Tos intensa, repetitiva y frecuente
- Respiración más rápida, ocasionalmente con la boca abierta
- Silbidos o ruidos al respirar por la inflamación de los bronquios
- Apatía, cansancio e intolerancia a cualquier actividad
- Mucosa de color azulado por la falta de oxigenación (en casos muy graves)
Combate la tos de tu gato en nuestra clínica en Castellón
El tratamiento que recomendamos en Alfa Veterinaria, en Castellón, varía según su nivel de asma. Para identificar el nivel de gravedad y descartar otras patologías, nuestros veterinarios necesitarán realizar una serie de pruebas a tu gato (radiografías y analíticas) y así decidir cuál es le mejor tratamiento posible.
De esta forma, el tratamiento es similar al de los humanos, debido a que se utilizan medicamentos con corticoides y broncodilatadores, siempre bajo prescripción y control veterinario, para reducir la inflamación y constricción de los bronquios.
Asimismo, en Alfa Veterinaria recomendamos no fumar delante del felino, mantener aireada la vivienda, evitar los aerosoles, perfumes o insecticidas y utilizar arena para gatos que no emita polvo. Descubre más información sobre nuestros amigos los felinos.